miércoles, 21 de mayo de 2008

Trágico.
Nuestra vida, nuestras vivencias… todo es tan individual, que en algunas ocasiones creo que las demás personas no existen, y de igual manera yo no existo para ellos… A veces me pregunto porque nuestra sociedad es tan individualista, cada uno piensa en lo suyo, y da lo mismo el de alado, y lo peor de todo es que al parecer es una tendencia que se acentúa cada vez mas en nuestro entorno… pero la culpa de todo esto la tiene nuestra naturaleza, sí, la que no nos permite ver mas, descubrir nuestros ojos y mente para entender de alguna manera al ser de alado. Si solo hubiese algunas pistas para poder guiarnos hacia un entendimiento más certero todo seria más fácil, la vida, los misterios, nuestro entorno… todo. Pero todo es imperfecto, por ello estamos condenados a vivir agónicamente nuestra pequeña existencia, haciéndonos preguntas sin respuestas, y nada, ya que el “todo” es infinito y no apto para entes finitos como nosotros. Esto si es trágico, no saber, no entender, he intentar a diario comprender los por que(¡!) del mundo, de la vida, de la familia o en definitiva, de la realidad que percibimos abstracta e individualmente… no deja de sorprenderme lo complejo que es solo pensar –limitadamente- que en el “mismo” momento en que yo estoy descargando ideas sin razón, otra persona esta comiendo, otra esta leyendo, otra durmiendo, otra viajando, otra llorado, otra riendo, etc, etc e infinitos etc. Y hasta otro “yo” puede andar por ahí preguntándose irracionalidades abstractas en otra dimensión, u otro continente, o planeta… en resumen, cada vez que pienso estas cosas me impresiono, me conmuevo y también, inevitablemente dudo. Dudo de lo que veo, de lo que pienso, de lo que creo (que no es mucho), dudo de la vida, de mi entorno, dudo de todo.
Al parecer solo nos queda resignar nuestras vidas al “no saber”, al “no entender”, a la gran “nada”.

(Día feriado)
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